
Durante el mundial de 1962 el equipo chileno siguió una extraña cábala. Antes del partido con Suiza, los jugadores comieron queso y ganaron por 3-1. Antes del encuentro con Italia comieron espaguieti y nuevamente se impusieron por 2-1. Llegado el turno de enfrentarse a la URSS decidieron beber vodka previamente!! Sin embargo esta vez perdieron por 4-2 lo que demuestra que las cábalas que incluyen emborracharse no son muy efectivas.
Artículo completo de The guardian.
5 comentarios:
Si las cabalas funcionaran todos deberian ganar, y eso es imposible, mejor que tener cabalas es jugar bien y meter lo que hay que meter. La culpa de perder tambien es de la cabala?
los argentinos se tenian que haber metido unas birras antes del partido contra alemania a ver si les ganaban, o a lo mejor se las tomaron...
Dejense de joder con las cabalas, eso no sirve para nada. Ganan los mejores, siempre
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